El sistema inmunológico es, según la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., una compleja red de células, tejidos y órganos que ayudan al organismo a combatir infecciones y otras enfermedades. Así, protege al cuerpo de posibles enfermedades combatiendo a gérmenes como bacterias o virus.
De esta forma, para que el sistema inmunológico funcione correctamente hay que llevar a cabo un estilo de vida saludable el cual debe incluir, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) la práctica de actividad física de forma regular, mantener un peso saludable, dormir lo suficiente, dejar de fumar, evitar el exceso de alcohol y comer bien.
En cuanto a este último punto, hay que ingerir frutas y verduras, proteínas magras, cereales integrales y leche y productos lácteos sin grasa o bajos en grasa. Además, hay que limitar las grasas saturadas, el colesterol, la sal y los azúcares añadidos.
Muchos alimentos que forman parte de una dieta sana y equilibrada tienen nutrientes básicos para mantener el organismo en buen estado. Estos contribuyen a mejorar el sistema inmunológico para, así, evitar resfriados y gripes o reducir los síntomas que estos producen. Son muchos los alimentos que contienen nutrientes beneficiosos para el sistema inmunitario, muchos de los cuales también son buenos para prevenir enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y obesidad, entre otras.
Los mejores alimentos para reforzar el sistema inmunológico
Este brillante consejo duplicará los beneficios antiinflamatorios del jengibre
Jengibre
El jengibre es una gran fuente de antioxidantes pero, además, destaca por su capacidad para combatir la gripe debido a sus propiedades antivirales. Así, es también excelente para reducir la tos y la congestión nasal y pulmonar gracias a su capacidad expectorante. Por este motivo, una infusión de jengibre, limón y miel es un potente antídoto contra el resfriado y la gripe.
Miel cruda, ¿qué es y cuáles son sus ventajas e inconvenientes?
La miel es un alimento muy utilizado para tratar la tos, además de mejorar las condiciones respiratorias. Esto se debe a sus propiedades antibacterianas, antibióticas y desinfectantes y su capacidad de favorecer la secreción de flema y mucosidad, lo cual la convierte en un excelente expectorante natural.
Ajo
El ajo, conocido por ser un poderoso antibiótico natural, destaca por sus componentes sulfurados (alicina, alil/dialil sulfidos), los cuales le otorgan estas propiedades antibióticas. Tal como señala la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), combate algunos microorganismos que, en ocasiones, son inmunes a los medicamentos.
Así pues, gracias a que es rico en alicina, una propiedad que actúa como antibacteriano, ayuda a evitar la proliferación de bacterias en el organismo. Se usa para tratar resfriados e infecciones respiratorias, depura los bronquios y ayuda a recuperar la salud de los pulmones.
Cítricos
Limones, naranjas, mandarinas o pomelos son una excelente opción para estimular el sistema inmunológico gracias a su contenido en vitamina C. Asimismo, contienen otras vitaminas, minerales, antioxidantes y aminoácidos esenciales.
Brócoli
El brócoli es una de las verduras más beneficiosas para el organismo. Aporta numerosos minerales y vitaminas, entre las que destacan la A, C y E, además de antioxidantes y fibra. Este activa las defensas gracias a los glucosinolatos que estimulan el sistema inmunológico.
Acelgas y espinacas
Espinacas
Al igual que el brócoli, las espinacas son una verdura que tiene una gran cantidad de nutrientes muy beneficiosos para el cuerpo, lo cual la convierten en un imprescindible de una dieta saludable. Destaca por su alto contenido en antioxidantes y betacarotenos, los cuales incrementan la capacidad del sistema inmune para combatir infecciones. Además, contienen vitamina C.
Los frutos secos son una gran fuente de proteína
Frutos secos
Los frutos secos y, en especial, las pipas de girasol, son ricos en zinc y selenio, dos nutrientes que ayudan a promover un sistema inmunológico fuerte. Asimismo, son una buena fuente de proteínas y fibra.
Pimiento rojo
Los pimientos tienen una gran cantidad de vitamina C, incluso más que los cítricos, un nutriente clave para el funcionamiento del sistema inmunológico y la salud de la piel. Así pues, se trata de un alimento muy beneficioso para evitar que los virus y bacterias ataquen al organismo.
Granada
La granada es una de las mejores frutas para evitar resfriados gracias a su alto contenido en vitamina C. Este alimento es tres veces más antioxidante que el té verde, y cubre las necesidades diarias de ácido fólico. Refuerza el sistema inmunológico y alivia la fiebre y el dolor de garganta.
Probióticos
Los probióticos pueden promover un correcto funcionamiento inmunitario, ya que ofrecen protección frente a distintos patógenos. Estos tienen una acción inmunomoduladora que no solo es beneficiosa para los intestinos, sino que también influye en las defensas que hay en otras mucosas, como las del aparato respiratorio, e incluso sobre las defensas (células y anticuerpos) que hay en la sangre. Entre los más destacados se encuentra el yogur, kéfir, kombucha, chucrut, kimchi y miso.















































































